Blefaroplastia en Málaga – Cirugía de párpados

Distinguimos distintos tipos de cirugía de párpados:

· Blefaroplastia Superior.- La piel del párpado superior va perdiendo elasticidad, con lo que acaba cayendo sobre las pestañas. Con esta intervención se retira el exceso de piel y las bolsas de grasa mediante una incisión y sutura muy fina que queda oculta en el pliegue del párpado, pasando desapercibida desde el primer momento.

· Blefaroplastia Inferior. - Al igual que ocurre con el párpado superior, el inferior también va perdiendo elasticidad y se va acumulando grasa, apareciendo las antiestéticas "bolsas". Existen dos vías de abordaje:

* Interna o Transconjuntival.- Las personas menores de 45 años generalmente no tienen un exceso de piel sino que únicamente tienen un abombamiento producido por un acúmulo de grasa; en estos casos se recurrirá a este técnica de abordaje que requiere una incisión en la conjuntiva en el interior del párpado. Esta técnica permite una recuperación más rápida y no requiere sutura ya que el tejido cicatriza muy bien por sí solo.

* Externa.- Esta intervención se lleva a cabo cuando se requiere retirar el exceso de piel que hay bajo los ojos. En este caso, se procede a realizar la incisión por debajo de la línea de las pestañas y una sutura muy fina, cicatriz apenas imperceptible que queda oculta tras las pestañas.

Normalmente se precisa tanto de la blefaroplastia del párpado superior como la del inferior; en ocasiones este procedimiento va asociado a la cantopexia, que consiste en el levantamiento del canto externo del ojo, o bien a un pequeño lifting facial que permita la elevación de las cejas.

A diferencia de las mujeres que sus cejas son más altas y arqueadas, los hombres tienen cejas más rectas, bajas y caídas del lateral. Los párpados superiores también vienen condicionados por el sexo, en las mujeres buscaremos un pliegue más alto y curvado y un párpado más despejado, mientras que a los hombres les procuraremos un pliegue más recto, más bajo y un párpado menos despejado.

Como en cada intervención, el Dr. Leopoldo Cagigal no solo tendrá en cuenta estos aspectos sino que hará una valoración individualizada de cada paciente para aportarle naturalidad en la mirada y armonía con el rostro.

Como en toda intervención, el Dr. Cagigal valorará el estado de sus ojos y realizará un examen médico previo para detectar cualquier contraindicación posible.

Si sus ojos tuvieran alguna infección que requiriese cuidados especiales o algún tipo de lesión, la cirugía habría que posponerla.

Si bien no es necesario realizar ningún examen oftalmológico previo a la intervención, resulta recomendable que en la consulta previa a la intervención le facilite al Dr. Cagigal el último informe oftalmológico del que disponga.

La blefaroplastia superior habitualmente se realiza bajo anestesia local. Al no requerir hospitalización, el alta médica se le dará tras un tiempo breve de recuperación.

Para los párpados inferiores y en la blefaroplastia completa es preciso la sedación por el anestesista para garantizar el confort del paciente. En estos casos se realiza mediante “hospitalización de día”, es decir, el paciente permanecerá unas horas bajo vigilancia hasta su completa recuperación.

En ocasiones puede ser necesario el ingreso cuando las preferencias del paciente lo aconsejen, como es el caso de optar por la anestesia general, o cuando vive alejado del centro hospitalario de elección.

Se trata de una cirugía breve, en el peor de los casos de poco más de una hora de duración y con un postoperatorio rápido y poco molesto. Tras un breve periodo de recuperación, en torno a las tres horas, el paciente recibe el alta hospitalaria.

Finalizada la intervención, es necesario aplicar frío sobre los párpados para reducir los posibles edemas y equimosis (moratones) que pudieran aparecer. Para ello, deberá humedecer unas gasas estériles en agua fría (o hielo) y colocarlas sobre los ojos cerrados, evitando frotar los párpados para no dañar al herida. Resulta conveniente que esta práctica se realice varias veces al día durante al menos dos días posteriores a la intervención, lo que le ayudará a mantener los ojos limpios y evitar el acúmulo de secreciones. Se deberán seguir las indicaciones del Dr. Cagigal en cuanto al aseo de los ojos, resultando bastante frecuente que aparezca sensación de tirantez o de ojo seco.

Deberá permanecer la mayor parte del tiempo en reposo con la cabeza elevada, durante las primeras 48 horas, para limitar la extensión de la inflamación y las equimosis. Es muy frecuente la aparición en mayor o menor grado de los mismos, que tardarán entre 8 y 10 días en desaparecer.

Es probable que durante los días siguientes a la operación surjan molestias en los párpados, en cuyo caso podrá tomar calmantes y antiinflamatorios que le aliviarán el dolor sin mayor problema. Si apareciese irritación en los ojos, signos de conjuntivitis, de infección, o reacciones a la anestesia, deberá consultar al Dr. Leopoldo Cagigal antes de tomar ningún medicamento.

En el caso de que se haya tenido que aplicar puntos de sutura, estos se retirarán a partir del quinto día.

¿Cuándo podré incorporarme a la vida normal?

Aunque el paciente no queda incapacitado en ningún momento, resulta necesario que mantengan reposo un mínimo de 4 días para incorporarse a la vida normal.
Recomendaciones:
* Trabajo: Podrá retomar su actividad laboral pasados entre 5 y 7 días tras la intervención.
* Protección solar: Deberá evitar la exposición al sol durante los primeros dos meses tras la intervención, por lo que resulta recomendable el uso de gafas solares de gran tamaño que protejan la zona intervenida de los rayos solares. Asimismo conviene el uso de un fotoprotector de alta graduación para procurar una buena cicatrización.
* Lentes de contacto: No resulta conveniente el uso de lentillas hasta que la inflamación ocular haya desaparecido por completo, pasadas una o dos semanas tras la intervención.
* Maquillaje: Transcurridos diez días de la operación, podrá maquillarse para disimular los restos de hematomas y las cicatrices, si es que todavía son visibles.
* Transcurridas 24-48 horas tras la intervención podrá volver a leer y ver la televisión.
* Noches: Si bien no está contraindicado dormir de lado, conviene acostarse boca arriba hasta que no se hayan retirado los puntos de sutura.

¿Se puede realizar la blefaroplastia combinada con otras cirugías?

Normalmente se realiza combinada con otros procedimientos quirúrgicos del envejecimiento facial. En ocasiones este procedimiento va asociado a la cantopexia, que consiste en el levantamiento del canto externo del ojo, o bien a un pequeño lifting facial que permita la elevación de las cejas.

¿Desaparecen las arrugas del contorno del ojo?

No, a veces es imposible quitar todo el exceso de piel del párpado inferior para evitar el efecto de "Ojo redondo". Para eliminar las patas de gallo habrá que recurrir a un tratamiento de lifting de cola de ceja y mejillas.
Las ojeras son pigmentos depositados a nivel del párpado inferior que requieren un tratamiento diferente, por lo que no desaparecerán con la blefaroplastia.

¿Cambiará la forma de los ojos?

La blefaroplastia no cambia la forma del ojo, para ello es necesario subir el ángulo externo del ojo mediante un procedimiento quirúrgico adicional (cantopexia). Podrá apreciar cambios sutiles que le aportarán juventud, luminosidad y expresividad en la mirada.

¿Desaparece el aspecto de cansancio?

Sí, con la blefaroplastia el ojo recupera luminosidad y desaparece el aspecto de agotamiento que se asocia al envejecimiento de los párpados.

¿Los resultados son definitivos?

Las bolsas de grasa que se acumulan en los párpados inferiores son erradicadas y en raras ocasiones vuelven a aparecer transcurridos varios años. Con la eliminación del exceso de piel realizada en los párpados ocurre de forma similar, si bien en cualquiera de los casos, la blefaroplastia podría repetirse si fuera necesario.

¿Que riesgo se asume?

Aunque el índice de complicación de esta intervención es mínimo, la blefaroplastia, al igual que cualquier otra intervención quirúrgica no está exenta de riesgos asociados como pueden ser la aparición de hematomas en el postoperatorio inmediato, cicatrices inestéticas, lagrimeo normalmente temporal, aspecto de ojo redondo, o ectropion residual.